Neurosis y psicosis

La psiquiatría, la ciencia que estudia y trata las enfermedades de la mente, clasifica cualquier trastorno psíquico en dos categorías: neurosis y psicosis.

Entendemos por neurosis aquel trastorno mental basado en la angustia que lleva a hipertrofiar los mecanismos compensatorios de turno de la misma. A priori, la angustia del neurótico no le impide mantener un contacto estable entre su conciencia y su entorno. Ni su identidad ni su percepción de la realidad se ven afectados. No obstante, y a fin de paliar la ansiedad que le desespera, el neurótico desarrolla una serie de conductas repetitivas y, en muchos casos, inadaptativas. Y he aquí el mal del trastorno neurótico: los patrones crónicos,  que en el argot popular se conocen como manías. El espectro de peligrosidad de éstas es variable; van desde la levedad de lo anecdótico hasta la gravedad de la hospitalización.

En bajo un documentário muy interesante sobre la esquizofrenia y la reforma psiquiátrica que se hice en España hace unas décadas:

Más allá de sus mecanismos compensatorios, para desviar del estrés que le atormenta, el paciente neurótico suele recurrir a recursos defensivos desvinculados del comportamiento como por ejemplo son el desplazamiento, la intelectualización, la negación, la proyeción y la represión.

Como dato curioso que nos aportan los psicologos en barcelona Dr.Romeu, téngase en cuenta que muchos de los más célebres psiquiatras de la historia, como Sigmund Freud o Carl Gustav Jung, establecieron una relación directa entre el genio creativo y la neurosis.

Por otro lado, entendemos por psicosis aquel trastorno mental que lleva a la distorsión parcial o total de la realidad por parte del paciente. El psicótico, por definición, suele experimentar alucinaciones, es decir, una sensación subjetiva que no va precedida de ninguna impresión en los sentidos, y delirios, o lo que es lo mismo, dice y hace disparates.

Dentro de la psicosis, existen categorías en base a la sistematización verosímil o inverosímil de las alucinaciones y delirios que padece el paciente. Algunos ejemplos: la esquizofrenia, el tipo paranoide de esquizofrenia, el tipo desorganizado de esquizofrenia, el tipo catatónico de esquizofrenia, el tipo indiferenciado de esquizofrenia, el tipo residual de esquizofrenia, el trastorno esquizofreniforme, el trastorno esquizoafectivo, el trastorno delirante, el trastorno psicótico breve, el trastorno psicótico compartido, el trastorno psicótico debido a enfermedad médica asociada, el trastorno psicótico inducido por sustancias y el trastorno psicótico no especificado.